Ciudad de México a 28 de octubre de 2021. A través de un proyecto de investigación participativa, Gonzalo Saraví (CIESAS) y Mario Quezada (profesor de educación media superior) se dieron a la tarea de escuchar e involucrar a las y los adolescentes en la realización de material multimedia que reflejara sus vivencias en el contexto de pandemia.
En particular, la suspensión de clases y el aislamiento social han significado cambios sustanciales en su cotidianidad, con múltiples repercusiones en diferentes ámbitos tales como el aprovechamiento escolar, la salud mental, las relaciones familiares, las pautas de sociabilidad e interacción con pares, entre otras.
En el proyecto participaron 59 estudiantes de educación media superior, Municipio de Nezahualcóyotl, y consistió en desarrollar una investigación sobre la experiencia de la pandemia por los adolescentes. Para ello y a través de reuniones virtuales recibieron el acompañamiento de los coordinadores y una breve formación en los pasos y actividades a seguir para realizar una investigación en ciencias sociales. A partir de ello, se definieron 3 actividades:
a) Construir las preguntas de investigación de interés y las técnicas de investigación que se utilizarían para obtener información.
b) Aplicar esas técnicas (entrevistas, encuestas, fotografías, etc.) y recopilar la información obtenida.
c) Diseñar y elaborar un producto en el cual expresaran los resultados obtenidos en su investigación.
La relevancia del proyecto consiste en que visibilizó a un segmento de la población cuya afectación por la pandemia ha sido subestimada. Además, se trata de un grupo cuya voz para opinar y su participación para la toma de decisiones en temas que les competen está prácticamente ausente en la esfera pública y gubernamental, pese a que se trata de un derecho establecido en la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas (1989) y reconocido en México no sólo por la adhesión a la convención sino por la Ley General de los Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes (2014).
Más allá de lo anterior, es importante porque puede ayudar a entender sus afectaciones y diseñar programas o estrategias que permitan reducirlas y favorecer el bienestar social y emocional de los y las adolescentes. Por ejemplo, pensamos que el regreso a clases no puede darse como si fuese simplemente un retorno luego de un período vacacional, sino que es necesario generar espacios de diálogo y reflexión colectiva entre estudiantes y docentes que les permita procesar lo vivido y reintegrarse a la “normalidad” en las mejores condiciones posibles.
Los contenidos generados se pueden ver en la lista de reproducción #AdolescentesEnPandemia que se ubica en el canal de YouTube del CIESAS.